La Montaña de Tariq
El bereber Tariq ibn Ziyat al Layti, a las ordenes del general yemení Musa Ibn Nusair, no pudo siquiera imaginar que en aquel punto donde se estrechan las aguas, allí donde cruzaron las primeras tropas árabes en su conquista de un nuevo mundo al que llamarían Al Ándalus, que más de un milenio mas tarde aparecerían unas extrañas cabinas rojas desde las cuales la gente podría comunicarse a distancia y que a aquel pescado que comían rebozado y cocido en aceite se vendería sobre papel de estraza con el nombre de fish’n’chips.
Tariq dio nombre al peñón, Jabal Tariq, la montaña de Tariq, que derivaría en Gibraltar y que antes había sido conocido como el Mons Calpe, cuando se identificaba como a una de las dos columnas de Hércules que delimitaban el orbe conocido, el Mediterráneo del Mar Tenebroso. El lema latino Non Plus Ultra resumía que no había nada más tras ellas. Los británicos lo conocen simplemente como The Rock y John Lennon lo escogió para contraer matrimonio con Yoko Ono en 1969.
En 1462 fue arrebatado definitivamente al territorio de Al Ándalus por el Duque de Medina Sidonia y pasó a manos de Castilla en 1502. Por poco más de dos siglos. Durante la Guerra de Sucesión Española fue ocupado por tropas anglo holandesas. La contienda acabó con el Tratado de Utrecht de 1713, por el que se cedía a perpetuidad a Inglaterra. Malteses, genoveses, judíos y portugueses se asentaron junto a la guarnición en el espacio que desde 1830 recibió el estatus de colonia británica. Hoy, convertido prácticamente en un paraíso fiscal, alberga las sedes de millares de empresas y una incipiente industria turística que ha ido substituyendo al sector naval en declive.
El idioma oficial es el inglés aunque los llanitos, como se conoce a los habitantes del Peñón, han acabado desarrollando una especie de pidgin en el que se usan ambos, inglés y español, o si se trata únicamente de ingles este tendrá un marcado acento andaluz.
En el sur, en Europa Point, la Punta de Europa, parecen agolparse el faro de la Trinidad, que alumbra desde 1841, la batería artillera de Harding, la capilla de Nuestra Señora de Europa, patrona del Peñón y la mezquita del Custodio de las Santas Mezquitas, es decir, del rey de Arabia Saudita, quien la financió.
En la inhóspita vertiente levantina del Peñón, donde sus paredes caen prácticamente a pico, hay tres pequeñas playas: Windhill, la del Gobernador y La Caleta, también conocida como Catalan Bay por la participación de un batallón de trescientos cincuenta soldados catalanes en la toma de la Roca. Otra paradoja de la Guerra de Sucesión.
© J.L.Nicolas
Leer más en edición impresa o Ebook